Violencia de género a la mujer en Ecuador

A pesar de que nos encontramos en una época más preocupada por los derechos y protección de la mujer, todavía es muy cercano a nuestra realidad el machismo dentro de la sociedad lo cual evidenciamos en los datos proporcionados por la Fundación ALDEA (2022) “desde el 1 de enero hasta el 31 de mayo de 2022, se registraron en Ecuador 118 muertes violentas por razones de género y en promedio cada 30 horas ocurre un femicidio en el país”. Además, las mujeres hoy en día sufren diversos tipos de violencia tales como físico, sexual, psicológica, es así que según el INEC (2011) “6 de cada 10 mujeres han vivido algún tipo de violencia de género”, lo cual nos permite analizar que no hemos logrado abolir dicha problemática.
Por otro lado, hay que tomar en cuenta distintos factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que una mujer sea víctima de violencia tales como pertenecer a grupos marginados, haber sido víctima de abuso en la infancia, conflictos dentro de la familia o con la pareja, abuso de sustancias, entre muchos otros. Dichos factores de riesgo están presentes en nuestra sociedad y es nuestra responsabilidad tomar acción ante ellos. En relación con lo mencionado anteriormente, es relevante analizar las cifras de este año que nos demuestran el alto porcentaje de violencia.

Por lo tanto, según la Fiscalía (Briceño, 2022) “hasta marzo de este año se realizaron 9 681 denuncias por violencia física, psicológica y sexual hacia la mujer o los hijos”. Por consiguiente, es importante que como sociedad analicemos ¿Qué podemos hacer para disminuir esta cifra?
De modo que, debemos enfocarnos en las acciones que están en nuestras manos para empezar el cambio tales como continuar fomentando normas sociales que promuevan la equidad de género, educar a la población desde temprana edad con valores como el respeto y empatía, disponer e informar de lugares seguros y concienciar acerca de la problemática de la violencia de género a la mujer para que la sociedad evite caer en tabús ya que al no validar la alta reincidencia de la violencia de género estamos aumentando las posibilidades de que siga ocurriendo diariamente.